El partido de hoy quedará marcado en la historia del Girona para siempre. El sueño europeo de los 'gironins' se hizo realidad. A falta de Stuani, fue Portu quien se convirtió en el héroe del equipo, metiendo dos goles y dando una asistencia, culminando así una increíble remontada saliendo del banquillo. No podía ser otro que Portu, un jugador histórico del club, quien llevara a cabo tal hazaña y diera el pase a la Champions League al equipo de Míchel, cuyos cambios fueron clave.
De este modo, el Girona gana por primera vez al Barça en Montilivi, reeditando el resultado de la ida en Montjuic (4-2), y arrebata al conjunto culer la segunda plaza en la clasificación. Si se mantiene en esta posición hasta el final de temporada sería la primera vez en 82 años que un equipo catalán quedase por encima del Barça. Además, la derrota de los azulgranas hace campeón de liga al Real Madrid, cuyos aficionados ya celebran en Cibeles.
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Un inicio de partido frenético
En el comienzo del encuentro se notaron las ganas de ambos conjuntos por alcanzar sus objetivos en este final de temporada: el Barça, la segunda plaza que da acceso a la Supercopa de España y el Girona la clasificación para la Liga de Campeones. El partido empezó de una manera completamente loca. En el minuto 3, tras un espectacular pase de Lamine Yamal a Christensen que superó toda la línea defensiva del Girona, el danés consiguió controlar el balón de manera increíble y hacer un remate cruzado que acabó entrando en la meta de Gazzaniga. Un gol que bien podría haber realizado un delantero de primer nivel como Lewandowski.
Sin embargo, la alegría le duraba poco a los azulgranas. La reacción del Girona no se hizo esperar. En la misma jugada de saque de centro después del gol, Iván Martín se internó por banda izquierda, dejó en el suelo a Ronald Araujo y puso un centro de ensueño para Dovbyk, que el delantero ucraniano no dudo en introducir en la portería rival, igualando el partido. Con este tanto, que hizo explotar de orgullo a la grada de Montilivi, Dovbyk afianzaba su puesto como pichichi de la competición, con 20 goles.
Después de la alta intensidad inicial, los goles se frenaron, pero el ritmo de juego no. La rápida circulación de balón, la presión alta y el fútbol valiente de ataque que proponían ambos conjuntos presagiaba un encuentro disputado y bonito de ver. El equipo de Xavi Hernández no se vino abajo y empezó a imponer su juego, acorralando al Girona en su mitad del campo y amenazando la portería de Gazzaniga en numerosas ocasiones, aunque sin acierto. Yangel Herrera fue clave a la hora de parar las constantes internadas de los culers, que encontraban con facilidad pases entre líneas. Todo el peligro del Girona en ataque lo generó Savinho, a partir de contraataques y balones en largo del guardameta argentino.
El equipo de Míchel se fue haciendo más fuerte defensivamente con el paso de los minutos, encadenó posesiones más largas y superó la presión del Barça. Pese a ello, el Girona no dio sensación real de peligro y cuando quedaban un par de minutos para que acabase la primera parte, el partido se le puso en contra. Una patada por detrás de Miguel a Lamine Yamal supuso un penalti favorable al conjunto culer. Lewandowski, con su habitual paradinha, transformó la pena máxima, devolviendo la ventaja en el marcador a los azulgranas.
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Portu hizo historia
Tras el descanso, el Barça siguió imponiendo su dominio, recuperando balones gracias a una buena presión tras pérdida. Por su parte, los gerundenses salieron con ambición de ir a por el partido. La presión alta del Girona dejó más espacios, que el Barcelona aprovechó para atacar por banda derecha a través de Lamine, aunque no logró sentenciar el partido.
Míchel se vio obligado a reaccionar y sus cambios fueron clave para revolucionar el partido y dar la vuelta al marcador. En el minuto 65’, el entrenador madrileño daba entrada a Portu y Yan Couto, dos jugadores de ataque. El plan le salió a la perfección. Tras un incomprensible regalo de Sergi Roberto, la pelota le llegó a Dovbyk, que asistía a Portu en el área. El primer balón que tocaba el delantero murciano iría dentro de la portería de Ter Stegen. Pocos minutos más tarde, Portu se vestía de héroe para culminar la remontada. Después de otra pérdida del Barça, corrió con el balón por la banda derecha y puso un pase hacia atrás para Miguel Gutiérrez. El lateral madrileño perforó la meta culer, dando la vuelta al encuentro.
Xavi Hernández intentó que su equipo reaccionara con los cambios, pero no fue capaz de revertir la situación. El Barça se hundió y no consiguió levantar cabeza. En cambio, el Girona, alentado su afición, que cantaba “que sí, que la Champions ya está aquí”, se vino arriba y fue a por más. En el 75’, otra vez Portu, marcaba el cuarto tras un espectacular remate imparable de crack mundial. Con el pitido del final del partido, la grada de Montilivi explotó de euforia en una jornada que no olvidarán jamás.
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Alineaciones del partido