Las segundas oportunidades no suelen salir bien, pero uno siempre vuelve donde fue feliz. Este verano dos historias muy bonitas volvían a encontrarse en Primera División. La historia del Girona y Cristian Portugués es bidireccional. Seguramente, ninguno de los dos estaría donde está sin el otro. 

El fichaje

Quique Cárcel conoció al delantero en el Albacete de Segunda División. El catalán apostó por él y en la temporada 16/17 llegó a Montilivi. Lo jugó prácticamente todo en los tres años que estuvo aquí. Con el descenso, el jugador había mostrado el nivel suficiente como para seguir en la élite del fútbol español y aceptó la oferta de la Real Sociedad. Estuvo tres temporadas en Donosti, en las que pudo jugar competición europea. Sus cifras iban disminuyendo y se marchó a Madrid, concretamente al Getafe. Una temporada difícil, ya que no pudo marcar ningún gol. Durante los últimos días del mercado de fichajes, se gestó su vuelta a Montilivi. Una apuesta arriesgada por el bajo rendimiento de su última temporada. Cabe decir que jugó en un equipo extremadamente defensivo, que le obligaba a ser carrilero en algunas ocasiones.

El redebut

Después de visitar Montilivi con el Getafe, en la segunda jornada de La Liga e irse con un contundente 3-0, el murciano no tardó en volver. El debut fue contra Las Palmas, en la jornada 4. Salió desde el banquillo con una tremenda ovación y en el 88' marcó el 1-0 para darle la victoria al equipo de su vida.

Otro rol

Portu no ha visto minutos en tan solo dos partidos. La mayoría de los minutos que tiene son como revulsivo, a pesar de que en febrero y marzo, Michel apostó por él desde inicio. En su primera etapa, él y Stuani eran indiscutibles en el once. La edad es el motivo principal de sus ausencias porque tienen que competir con un Dovbyk extraordinario y dos extremos como Savinho y Tsygankov, que tienen un nivel altísimo. Aun así, los dos han aceptado su rol y cada vez que salen al campo aportan. La garra y la buena presión de Portu son dos características que la afición y Michel valoran muy positivamente. Puro corazón.

Las cifras

6 goles y 7 asistencias en 32 partidos. Teniendo en cuenta que no suele disputar los 90 minutos, son cifras muy buenas, de revulsivo. No ha tenido lesiones, cosa que le ha beneficiado, ya que muchos compañeros han estado fuera y los ha podido suplir. Ha participado en banda derecha, en la media punta e incluso formando dupla con Dovbyk o Stuani arriba. Esto último nos traslada al 2017 con el 5-3-2 de Pablo Machín, que le dejaba en punta junto al uruguayo.

Contrato

Quique Cárcel firmó al jugador hasta 2027. Portu y su familia están felices en Girona. No sería extraño repetir un caso Stuani. No sabemos si se va a retirar en Montilivi, ya que con 31 años aún tiene mucho recorrido, pero sería un fin de carrera ideal.