Iker Muniain le comunicó a todos sus compañeros de equipo que se marchará a final de la presente temporada. El jugador comunicó que no fue una decisión fácil, pero que era lo mejor para él, y para el club.

  • Comunicado

A las 10:57 del 24 de abril, el Athletic Club de Bilbao colgó en todas sus redes sociales un video de despedida de Iker Muniain, en dicho video, el jugador da gracias a la afición, al club, y comenta lo feliz que se marcha del club de su vida.

En dicho video, el primer capitán del barco llamado Athletic explicó lo siguiente:

"Llegué a Bilbao con tan solo 12 años, siendo un niño, y hoy, casi dos décadas después, vengo a anunciaros mi marcha al final de esta temporada, después de 15 años en el primer equipo".

"Me voy feliz, con el sueño de haber levantado la ansiada 25 Copa del Rey, y de haber sacado la Gabarra 40 años después".

"Ha sido algo increíble. La comunicación que hemos mostrado entre afición y equipo demuestra que verdaderamente somos únicos en el mundo".

"Ha sido una decisión difícil, pero creo que es lo mejor para mí, y para el equipo. En los últimos partidos que nos quedan lucharemos por esa cuarta plaza juntos".

  • Segundo con más partidos

Con su marcha, Muniain no solo dejará de ser jugador del Athletic, si no que terminará su marca personal en el club en cuanto a partidos.

Por el momento, y con varias fechas de liga aún por jugador, Iker Muniain se marchará siendo el segundo jugador con más partidos del club. Tan solo por detrás del grande de Iribar, y por delante de Txetxu Rojo con 557 partidos.

  • No se retira

En el comunicado no se refiere a que Muniain dejará el fútbol, sino que únicamente dejará de ser parte de la plantilla del Athletic. Se prevé que seguirá jugando fuera de España, ya que el jugador no querrá enfrentarse nunca al equipo de sus amores.

Aunque por el momento, Marcelino García Toral sigue preguntando por él, ya que en el Athletic entablaron una buena relación, y el anterior entrenador roji-blanco ya había tocado a su puerta antes del anuncio. Ya se verá que pasa a final de temporada.

Iker Muniain celebrando entre lágrimas la consecución de la Copa del Rey / Fuente: Getty Images
Iker Muniain celebrando entre lágrimas la consecución de la Copa del Rey / Fuente: Getty Images
  • El Rey con corona

Iker Muniain, ese hombre que todo niño ha querido ser alguna vez en su vida, un tipo, que llegó a primer equipo hace 15 años, y que ha visto como su equipo perdía y perdía finales de Copa, Europa y Supercopa por el camino.

Pero él, como un verdadero capitán de su barco llamado Athletic, no se fue de aquí, como otros sí lo hicieron, y luchó como nadie para devolver a su equipo y a su afición todo ese amor y cariño mostrado levantando "la 25" Copa del Rey finalmente.

Y es que, tras una final de Copa perdida en el año 2009 del equipo, Iker Muniain llegó al club con un objetivo, lograr la Copa del Rey y todo lo posible durante su tiempo en el club.

Muniain y Óscar de Marcos bajando del avión levantando la Copa del Rey / Fuente: Marca
Muniain y Óscar de Marcos bajando del avión levantando la Copa del Rey / Fuente: Marca
  • Finales perdidas

En 2012 le llegó su primera oportunidad, final de la Europa League, rival, un Atlético de Madrid con Radamel Falcao, el tigre que dejó a los leones sin opciones en la final, perdiendo así 3-0.

Ese mismo año, tras esa final, llegaría la de Copa del Rey, rival, el Barcelona de "Tito" Vilanova, un equipo casi imposible de ganar, y algo que se hizo realidad, ya que Muniain volvió a perder otra final con el Athletic.

En 2015 la volvía a tener Iker para levantar esa ansiada Copa del Rey, pero como no, el Barcelona volvía a ser el rival de los bilbaínos, y otra vez, terminaron siendo derrotados duramente.

2020, coronavirus, final de Copa contra la Real Sociedad, máximo rival del club, era la final casi perfecta, solo faltaba la afición. Era una final donde cualquiera se la podía llevar, y con un juego muy pobre de los dos equipos, fueron los blanqui-azules los vencedores, e Iker Muniain, dejó una imagen que quedó marcada para siempre, ya que tocó la copa al saltar al campo, algo que le persiguió durante mucho tiempo.

2021, dos semanas después de perder la última final, el equipo, e Iker Muniain, llegaba al partido con pena, pero con ilusión, pero nada ni nadie pudo contra el Barcelona, y todo apuntaba a que el Athletic no volvería a ganar nunca más una Copa del Rey.

Iker Muniain llorando desconsoladamente tras perder la final de la UEFA Europa League contra el Atlético de Madrid / Fuente: Sport You
Iker Muniain llorando desconsoladamente tras perder la final de la UEFA Europa League contra el Atlético de Madrid / Fuente: Sport You
  • "La 25" tras 40 años

Pero sí, el Athletic volvía a tener otro reto con la historia, esta vez enfrente, se encontraba un rival asequible, el RCD Mallorca, un equipo que llegó a la final estando a 4 puntos del descenso.

Esta vez, a diferencia de las demás finales, Iker tenía el rol de suplente, el partido empezó mal, pero poco a poco todo salió, y el partido terminó marchándose a los penaltis. Y claro, Iker Muniain no se iba a quedar sin lanzar uno, y de esa forma, metió el segundo, después de que uno del Mallorca fallara, y adelantó a los suyos.

Y finalmente, a la una de la mañana del siete de abril, el Athletic Club se proclamó campeón de la Copa del Rey, e Iker Muniain, dejó de recibir "platos" por parte del Rey de España, para al fin, poder tocar con sus manos de ganador la Copa del Rey.

Iker Munian levantando la Copa del Rey entregada por el Rey de España / Fuente: Getty Images
Iker Munian levantando la Copa del Rey entregada por el Rey de España / Fuente: Getty Images

Y con eso, a Bilbao no solo llegó la Copa, sino que la Gabarra volvió a surcar la ría 40 años después, y como comandante de ese barco se encontraba Iker Muniain, el "gauchito de la txantrea", el líder de los líderes, un maestro de ceremonias celebrando con los suyos ese ansiado título, un momento inolvidable en los corazones de todos los "athleticzale".

Iker Muniain, Bilbao estará siempre en tu corazón, y tú siempre estarás en el corazón de todos.