El Villarreal cae ante el Atlético de Madrid y comienza a dejar de pensar en volver a Europa. Con esta derrota el Submarino pone fin a una racha de 9 partidos sin perder que les ha llevado a estar de nuevo compitiendo con los mejores equipos de la tabal liguera.

El partido estuvo igualado hasta los minutos finales donde el desenlace no fue favorable para los de La Plana. Pese a salir derrotados, la mejora en juego y resultados sigue siendo ascendente, y hasta el final de la temporada todo puede pasar en la lucha por una plaza en Europa.

Los de Simeone consiguieron llevarse el partido cerca del añadido y recuperaron el cuarto puesto, en zona Champions. En su lucha con el Athletic Club por la última plaza de la máxima competición europea supieron sufrir las embestidas groguetas y sacaron los tres puntos del que parecía ser un fortín.

Europa se aleja

Puntuar en casa era crucial para seguir soñando con Europa, pero la derrota en los minutos finales deja al Villarreal lejos de la zona donde se le esperaba al inicio de la temporada.

Con la victoria ayer de la Real Sociedad, el último puesto que da opción de jugar en Europa se queda 11 puntos, una cifra casi inalcanzable con solo 9 jornadas por delante.

Empate y confiando

El partido se esperaba duro desde el inicio y así ha fue. Los de Simeone se adelantaban antes del minuto 10 y ponían en un aprieto al Villarreal que se rehizo y resistió en el primer tiempo.

Tras el paso por vestuarios, los que salieron a demostrar que iban en serio fueron los de Marcelino que empataban el partido a los cinco minutos de segunda parte y devolvían la ilusión a la afición amarilla.

Remar y morir en la orilla

Tras el empate, todo podía pasar. Con ocasiones para ambos, el acierto final llevo los tres puntos para los visitantes con un gol rozando el tiempo añadido.

Saúl Ñiguez, señalado por la afición colchonera, remataba un balón que ponía el definitivo 1-2 en el minuto 87, y dejaba al Submarino sin margen de maniobra.

Defensa de circunstancias

Con las bajas de Alberto Moreno y Kiko Femenía por sanción, la defensa presentó nombres en zonas que no suelen ocupar. La buena noticia es la vuelta de Foyth que parece cercana.

La línea defensiva anta los madrileños estuvo formada por cuatro centrales: Cuenca, Mandi, Albiol y Mosquera, algo que ya hemos visto en otras ocasiones. Pese a jugar fuera de zona, el resultado ha sido positivo, pero el resultado final no ha sido favorable para sus intereses.

Reina la emoción

Con un emotivo minuto de silencio comenzaba un partido que a la afición amarilla solo podía traer buenas sensaciones. Todo en Vila-real tiene parte emotiva en esta recta final: intentos de remontada histórica, reconocimiento a baluartes del club y pelea con los mejores de la liga por devolver al equipo a competición europea.

La marea grogueta sigue estando ahí, y con la llegada de Marcelino el equipo ha sabido rearmarse y está volviendo a entrar en sintonía con sus seguidores que van a seguir soñando con Europa hasta el final.

Última oportunidad

En la próxima jornada, los de Marcelino viajan hasta San Mamés en el que será un partido decisivo para seguir en la lucha europea. Con una derrota ante el Athletic se acabaran prácticamente todas las opciones de pelear por la zona de honor.

La distancia aumenta con Europa y los castellonenses tendrán la última opción de remontar ante otro rival directo. El choque promete intensidad ya que los bilbainos también pelearan por no alejarse de la zona de Champions.