Llegó la hora. No hay marcha atrás. España se juega el todo por el todo y lo hace tanto en modalidad masculina como femenina. Este apasionante y maltratado deporte por los medios de comunicación se juega su futuro y la demostración de que el modelo seguido en los últimos años fue el correcto. Ambas selecciones están inmersas en un proceso de renovación y regreso a tiempos gloriosos, y estas eliminatorias marcarán si es el momento para dar un salto en ese proceso o habrá que seguir esperando. Las Palmas de Gran Canaria y Guadalajara se vestirán de gala para presenciar el ascenso a la gloria o el descenso a los infiernos.

Grecia, correoso rival para los chicos

Los de Fernando Muñoz necesitarán de su mejor juego para alcanzar la clasificación. La nota positiva y que puede dar confianza a los españoles, es el enfrentamiento que mantuvieron hace apenas un mes, en la ronda de amistosos preparatorios previos al Preeuropeo. En él, España se impuso por 3-1. 

Se jugará el partido de ida en Las Palmas el 1 de octubre a las 20:00 hora peninsular

Los helenos cuajaron un buen Preeuropeo, quedando en segunda posición del grupo C habiendo perdido tan solo un partido, mientras que España cayó en tres de los seis disputados. Su mejor jugador es Mitar Tzourits en ataque, y Andreas Andreadis en los bloqueos defensivos. El head to head que mantienen ambos equipos es de 7-3 favorable a España lo que supone otro motivo para el optimismo.

Ucrania, selección de mucha entidad

Tampoco lo tendrán nada sencillo las chicas de Pascual Saurín, ya que su rival llega con el aval de haber perdido únicamente ante la todopoderosa Italia en el Preeuropeo. Se impusieron con comodidad a Letonia y Austria e incluso llegaron a jugar un quinto set contra las transalpinas.

Guadalajara acogerá el encuentro de vuelta, el 7 de octubre a las 20:00 hora peninsular

Esto habla a las claras del potencial de un equipo en el que sobresale la colocadora Olena Novgordchenko y la rematadora Nadiia Kodola. Su principal arma es el servicio, al contar con jugadoras muy potentes. No se han enfrentando nunca en los últimos diez años por lo que el resultado es incierno, aunque se espera mucha igualdad.

El formato de competición de esta repesca consiste en dos partidos, jugados cada uno en casa de unas de las selecciones. En caso de que ambas ganen un encuentro, la eliminatoria se resolvería en función de los sets adquiridos. Ganar por 3-0 o 3-1 otorga más puntos que hacerlo por 3-2. Si el empate persistiera atendiendo a este factor, habría que jugar un set de oro al finalizar el partido de vuelta.

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Sobre el autor
Diego Jiménez Rubio
Fui Coordinador General de Más Deportes y Viajes, y miembro del Consejo de Dirección de VAVEL España. Me encanta comunicar mi pasión por el turismo y el deporte, y hacerlo con responsabilidad y profesionalidad.