Europa durante el paso de los años ha demostrado ser una gran potencia en lo que a tenis se refiere, no por nada los primeros rankeados actuales pertenecen al viejo continente. Durante los últimos años en el circuito ATP se ha visto un amplio dominio europeo con la presencia de los cuatro fantásticos (Nadal, Federer, Djokovic y Murray) y a ellos debemos añadirle las irrupciones de Ferrer, Berdych, Wawrinka, Soderling y Zverev que también incursionaron dentro de los mejores cuatro jugadores del mundo durante la última década.

Es por todo esto que la Laver cup fue todo un éxito para Europa. Sin embargo el resto del mundo dio mucha batalla y estuvo muy cerca de igualar las acciones a doce puntos por lado para llevarla a un desempate que prometía ser muy emocionante, desempate que no se dio gracias a la grandeza de Roger Federer que pudo cerrar la serie ante un talento emergente como lo es Nick Kyrgios. Es importante destacar que para este evento, ingresan los cuatro mejores rankeados de Europa al igual que para el equipo del Resto del mundo, así como dos selecciones que realizan los entrenadores, en este caso Björn Borg y John McEnroe. También hay que resaltar que el ranking a tomar a consideración para el ingreso a este nuevo torneo, es el que aparece durante el primer lunes luego de la finalización de Wimbledon.

Los participantes por Europa fueron: Rafael Nadal, Roger Federer, Tomas Berdych, Marin Cilic, Alexander Zverev y Dominic Thiem, mientras que por el resto del mundo estaban cuatro norteamericanos Jack Sock, John Isner, Sam Querrey y Frances Tiafoe, además de Nick Kyrgios y Denis Shapovalov. Europa cuenta con dos de los jugadores que están llamados a ser los reemplazantes de los cuatro fantásticos como lo son Zverev y Thiem, mientras que el resto del mundo tiene a Shapovalov, Kyrgios y Tiafoe que son jugadores que prometen dar mucho que hablar durante los próximos años. Pero lo cierto de todo esto, es que la realidad es otra, porque mientras esos tenistas se terminan de establecer ya estamos vislumbrando una venidera Laver Cup en 2018 que ya tiene sede en Chicago, Estados Unidos y con los mismos entrenadores (McEnroe y Borg).

De manera que si los rankings se mantienen y las lesiones respetan a los jugadores, en 2018 promete ser un gran torneo, repitiendo jugadores como Nadal, Federer y Zverev y las inclusiones de jugadores de la talla de Andy Murray, Novak Djokovic y Stanislas Wawrinka que tras las pausas obligadas por lesiones prometen venir a comerse a todos en 2018, sin dejar fuera de la lucha a jugadores como Grigor Dimitrov, Marin Cilic, Dominic Thiem, Pablo Carreño Busta y David Goffin que también tienen todo para llegar a este torneo.

Por el lado del resto del mundo quizás ya veamos a un Shapovalov asentado dentro de los mejores del mundo, donde posiblemente repita Kyrgios y el resto de plazas queden entre Sock, Isner y Querrey luchando por repetir y Del Potro, Nishikori y Raonic reclamando lo que debió ser suyo este 2017 y un Kevin Anderson también dando la pelea, luego de disputar su primera final de Grand Slam en US Open. Otro a tener en cuenta es al argentino Diego Schwartzman que ha tenido un gran 2017 y si mantiene este nivel puede ser otra alternativa para el resto del mundo.

Pero no cabe duda que en la actualidad el dominio Europeo es más que notable, teniendo en cuenta que los primeros diez del ranking nacieron en el viejo continente. El primero del resto del mundo, apenas es Milos Raonic en el 11 y Kei Nishikori en 14 pero sabemos que ambos subirán puestos en 2018 recuperando posiciones perdidas. Y si nos extendemos por los primeros 100 del mundo, tenemos a 67 jugadores nacidos en Europa y a 33 nacidos en el resto del mundo, lo que demuestra que Europa es dueña de este deporte en la actualidad. 

Nadal y Federer celebrando la victoria en doble | Foto: Zimbio

Este tipo de torneos, además del espectáculo que dejan tras su paso y las ganancias que le genera tanto a los jugadores como a los organizadores, dejan ver la otra cara de los tenistas que no se ve mucho durante el circuito, se ve la hermandad que existe entre ellos y el buen rollo que tienen y esto también es muy bonito de ver para el aficionado que va a las canchas y a los que los siguen por TV. Es muy lindo ver como fanáticos de Nadal y Federer se unieron para hacerse llamar 'fedalistas', por eso es que se aplauden este tipo de ideas y se espera se extienda por muchos años y también se extienda a la WTA que tanta falta le hace torneos como este.