28-3. La temporada 16/17 no había podido ir mejor para los Atlanta Falcons, quienes con un espectacular ataque -esta vez sí- liderados por Matt Ryan, consiguieron once victorias en regular season y aniquilaron a Seahawks y Packers en el camino hacía el Superbowl. Lo mismo estaban haciendo aquella noche en Houston, nada menos que ante Bill, Tom y los Patriots, probablemente la franquicia más legendaria de la era moderna. Todo iba sobre ruedas hasta ese fatídico 28-3. Lo sucedido a partir de entonces, ya forma parte de los libros de historia como una de las mayores remontadas jamás vistas en el deporte norteamericano. Y precisamente a eso es a lo que se enfrentan los Falcons este año. Al miedo, al abismo, al vertigo. A ese 28-3.

A pesar de lo ocurrido, en Atlanta tienen motivos para encarar la nueva temporada con las máximas aspiraciones. Por supuesto, son los absolutos favoritos para ganar la NFC south e incluso para repetir final. Porque los Falcons conservan de manera prácticamente intacta el arsenal ofensivo que tan bien funcionó antaño.

Uno de los mejores ataques de siempre

La versatilidad y cantidad de opciones en ataque hizo de los Falcons uno de los mejores equipos ofensivos de siempre en la historia de la NFL, anotando la friolera de 540 puntos. Este año no quieren ser menos y buscarán repetir el éxito a través de a misma fórmula. Cuentan con un dúo de corredores envidiables como son Devonta Freeman -a quién renovaron este verano conviertiéndolo en el running back mejor pagado de la liga- y Tevin Coleman, un excelente backup que incluso alterna carreras con Freeman debido a ser un corredor de diferentes características.

Julio Jones volverá a ser la referencia ofensiva del equipo. | Foto: Bleacher Report
Julio Jones volverá a ser la referencia ofensiva del equipo. | Foto: Bleacher Report

El cuerpo de receptores no se queda corto, ya que esta encabezado por uno de los mejores wide receivers de la generación, Julio Jones. Jones volverá a ser la primera opción cuando Ryan decida jugar a pasar y si esta a su nivel habitual, será otra vez determinante para dinamitar a las secundarias rivales. Acompañando a la super estrella continúan Mohamed Sanu asumiedo el rol de número dos y Taylor Gabriel como big play man.

La baja más sensible, en el banquillo

Probablemente la única perdida realmente dolorosa en la franquicia a sido la de su coordinador ofensivo, Kyle Shanahan. Shanahan, el llamado arquitecto de todo este entramado ofensivo, fue el mejor en su posición el año pasado y eso le valió para que los San Francisco 49ers reclamaran su presencia y le hicieran head coach del equipo. Una de las principales dudas de este equipo será ver si toda esta aglomeración de estrellas es capaz de funcionar con la misma efectividad bajo la tutela de otro.

Matt Ryan ante las maldiciones de la NFL

Si alguien estará expuesto bajo el foco de atención y mediático esta temporada será el actual MVP Matt Ryan. El quaterback, que jugó a un nivel descomunal el año pasado, salió malparado por la ya mencionada remontada en el Superbowl y se encontrará con el reto de liderar al equipo un año más sobre el terreno de juego y que no decaiga justo el año después de llegar a la gran final.

Nunca en la historia de la NFL un equipo que ha salido perdedor en el último partido de la temporada ha podido repetir presencia al año siguiente. Y precisamente ese debe ser el objetivo de Ryan, romper con dicha superstición y poder darle a los suyos la oportunidad de una revancha consecutiva, tarea que no será fácil como bien demostraron los Panthers durante el curso anterior.

Matt Ryan tendrá que demostrar quién es el MVP. | Foto: Bleacher Report
Matt Ryan tendrá que demostrar quién es el MVP. | Foto: Bleacher Report

Apabullados por los Broncos en el Superbowl de hace dos años, los Panthers con un Cam Newton recientemente nombrado MVP -como Ryan- firmaron una temporada absolutamente desastrosa, siendo tal el desbarajuste que se vieron ya sin opciones realmente pronto. En Atlanta temen que este año pueda suceder algo parecido, y para evitarlo "Matty Ice" deberá más que nunca hacer honor a su apodo.

Estos Atlanta Falcons están confeccionados para romper cualquier tipo de maldición y todas las predicciones les sitúan no solo con opciones de repetir final, sino que son los favoritos para el título.

A pesar de llegar a septiembre con regusto a remontada, en la ciudad de la Coca-Cola confían en cumplir dichos pronósticos y poder alzar el trofeo Vince Lombardi por allá el mes de febrero. Ese trofeo que acariciaron con los dedos hasta ese 28-3 cuando apenas faltaban 17 minutos para terminar el encuentro. El resto, ya es historia.

 

VAVEL Logo