Pol Espargaro (Barcelona, España, 10/06/1.991) tras una buena temporada el año pasado con el equipo de Monster Yamaha Tech3 (octava posición del Mundial), cambia de equipo para asentarse en el Red Bull KTM Factory Racing. Le está costando hacerse a la nueva moto que según él "es muy física, pero me gusta". Se nota, poco a poco se le está viendo mucho mejor encima de la KTM

PREGUNTA. ¿Quiso ser piloto de motociclismo desde pequeño?

RESPUESTA. Realmente no lo tenía claro cuando era pequeño. Jugaba en un equipo de fútbol de mi ciudad, me gustaba mucho y era portero. En el caso contrario, el de mi hermano, era un loco de las motos. Llegó un momento que mi padre me dijo que tenía que elegir, que los domingos eran las carreras y los partidos y las dos cosas no podían ser… Entonces ya me tuve que decantar. Creo que me decanté por las motos por mi hermano mayor. Y bueno, no ha ido mal…

P. También jugaba al bádminton y fue campeón de Cataluña, ¿cómo se cambia el mango de una raqueta por el de una moto?

R. Es muy diferente, pero me encantan los deportes. Toda mi vida he practicado todo tipo de deporte, sea el que sea. Me gusta mucho estar en activo. En el colegio estaba a extra escolar de bádminton y me apunte con unos amigos. Me gustó mucho y me defendía bastante bien. Soy un tío bastante físico, al que le gusta mucho correr. Me empezó a gustar, empecé a entrenar cada vez más, pero lo tuve que dejar, evidentemente… Fue un tiempo corto, pero intenso. Me gustó muchísimo y le cogí muchísimo cariño a este deporte.

P. ¿Qué sensaciones tiene tras la primera mitad del campeonato?

R. Está siendo complicado, difícil. Era algo que nos esperábamos, la verdad. La moto es muy muy virgen, muy nueva y nos cuesta evidentemente, ponerla a punto cada vez que llegamos a un circuito nuevo. Con las piezas nuevas hemos conseguido armar la caballería y que las cosas vayan a mejor más rápidamente.

P. ¿Cuál es el objetivo de esta temporada?

R. El objetivo va a ir cambiando, no hay algo que vaya a ser a lo que queramos llegar, aspirar porque no sabemos el potencial que tenemos. Cada vez vamos mejorando, pero no nos ponemos metas. KTM quiere ganar ya y nosotros como pilotos también. Vete a saber dónde podemos llegar a fin de año, para bien o para mal… Es algo que no se puede prever ahora mismo.

P. ¿Qué diferencias tiene la moto actual respecto a la del año pasado?

R. Sí. Son diferencias muy muy grandes. La moto del año pasado era mucho más estable; un motor más suave, más dócil. Era más fácil de conducir. Esta moto es muy física, tienes que luchar mucho más con ella para entrar en las líneas. Es muy complicado hacer dos vueltas por el mismo sitio. Requiere mucho más físico y eso a mí me gusta. Pero sin duda alguna, estamos muy atrás de lo que estábamos el año pasado y tenemos que llegar dónde estábamos.

P. ¿Cómo ve a los niños españoles en la categoría de Moto3?

R. ¡Niños, no tan niños porque dan un gas qué no veas! (risas). Estoy viendo que Joan Mir y Jorge Martín lo están haciendo muy bien. Con Jorge entrenamos juntos en Andorra porque vive allí también, su preparador es el mismo que el de Aleix y estamos un montón de tiempo juntos y sé que está super fuerte físicamente. Está muy motivado y me gusta mucho como conduce. Tenemos madera, tenemos potencial, es un piloto joven con muchas ganas. Mir este año va a por todas y junto a Canet, nos están dando carreras muy bonitas, muy divertidas.

Pol Espargaró atiende a VAVEL Motor | Foto: María Polvillo González
Pol Espargaró atiende a VAVEL Motor | Foto: María Polvillo González

P. ¿Qué sintió al ganar el Mundial de Moto2 en 2.013?

R. Es culminar un sueño, dar sentido a todo lo que llevas haciendo desde que empezaste a correr en moto. Cuando empecé, no me esperaba llegar a MotoGP ya que empecé en tierra… Nunca me imaginé el ser Campeón del Mundo. Sin duda eso se va trabajando, poquito a poquito. En ese momento te das cuenta de todo lo que has currado, lo que has luchado; de todas las caídas, lesiones; ahí todo cobra sentido y te da fuerzas para seguir luchando.

P. tres temporadas terminando entre los diez primeros del Mundial de MotoGP. Este año no está siendo igual, ¿a qué se debe?

R. Evidentemente, la moto es completamente nueva. Empezamos desde cero. El primer tornillo de esta moto era nuevo hace dos años. KTM está haciendo un esfuerzo increíble junto con Red Bull para tirar este proyecto adelante, pero necesitamos tiempo. Una cosa así no se hace de la noche a la mañana. Las marcas japonesas, junto con Ducati y Aprilia, llevan muchos años en este negocio. Llega KTM y por muy buenos que sean, en cuestión de dos años no vamos a estar delante de ellos. Aun así el futuro pinta muy bien, aunque tenemos que ir pasito a pasito, trabajando el día a día como estamos haciendo.

P. ¿Cómo ve el Mundial de MotoGP?

R. Sin duda alguna lo de Maverick no me ha sorprendido porque sabía el potencial que tenía, además del potencial de la moto. Si que es cierto que Yamaha ha dado un pasito hacia delante. Pensaba que Honda estaría más cerca, sobre todo en las primeras carreras después de no hacer un muy buen año la temporada pasada. Evidentemente, Marc hizo un temporadón, pero la Honda no estaba al nivel de los otros años. En general muy divertido.

P. ¿Es una persona supersticiosa?

R. Hago todo empezando por el lado derecho: los calcetines, primero el derecho; los guantes, el derecho primero; cuando salgo a la moto, primero la toco con la mano derecha… Son tonterías que, para mí, no tienen mucho significado. Lo único que hay que hacer es estar tranquilo, haciendo lo mismo de siempre. Pienso que se crea una rutina más que otra cosa.

P. ¿Cómo lleva competir con su hermano en la categoría reina?

R. ¡Depende del año! ¡Cuando está más cerca él de mí, peor! (risas). Lo cierto es que a Aleix le gusta mucho competir contra mí, pero a mí lo cierto es que no tanto porque en cuanto estás en pista el respeto que le tienes a tu hermano es mucho mayor que a cualquier otro piloto. Las medidas para adelantar a tu hermano, aunque tu no quieras, siempre son un poquito mayores. Quieras o no, eso ya te está influyendo de alguna manera. Cuando te influye, es tiempo que se pierde. A mí no me gusta mucho, pero aun así estamos viviendo nuestro sueño, cumpliendo el de muchísima gente y espero que sea por muchos años más.

P. Ya para finalizar, compléteme la frase. El año que viene me gustaría…

R. El año que viene me gustaría estar luchando en el TOP 10 todas las carreras.