Posiblemente Ducati esperaba más este año. O los aficionados. La llegada de un piloto campeón como Jorge Lorenzo daba esperanzas de ver de nuevo a la escudería italiana de manera más constante en lo más alto de las clasificaciones. Lo cierto es que todo el mundo esperaba ansioso un nuevo Casey Stoner en el mundial. Pero parece que las cosas no han llegado a ser así.

La pretemporada fue complicada. Ducati buscaba nuevas formas de mejorar su aerodinámica tras la prohibición de las aletas que tan bien les iba. Sacaron un nuevo cadenado que jamás volvimos a ver. También buscaban mejorar otro sinfín de problemas en los giros o las frenadas. Pero llegado el campeonato, el piloto que menos esperábamos de los dos nos sorprendió gratamente.

Dovizioso, la voz cantante de Ducati

Ya son muchas temporadas en el equipo. El italiano ha pasado de todo con la escudería y ya está más que acostumbrado a todo lo que pueda venir. La temporada empezó, como dije, con sorpresas. En el Gran Premio de Qatar se adjudicó una segunda posición que dejaba muy buen sabor de boca en el box, aunque lo cierto es que no se conformaban. Querían lo máximo. De hecho, tras esta primera cita se fueron directos al circuito de Jerez, uno de los más complicados para ellos, donde siguieron buscando cualquier solución para mejorar la moto en unas sesiones de test privado. 

Argentina se convirtió en una pesadilla para Ducati. Un fin de semana que quiere evitar que se repita en todo lo que queda de competición. La clasificación fue horrible, Andrea salía desde las 13ª posición y el domingo acabó la carrera de la peor manera posible, una caída que ya no le permitió hacer nada más. Una vez en Austin las cosas fueron remontando, aunque de manera discreta. Dovizioso pudo hacerse allí con 10 puntos y un sexto puesto que devolvía esperanza.

Iniciamos el tramo europeo de la competición. Jerez esperaba con los brazos abiertos el mundial, aunque el trazado no sea el preferido para las Ducati por sus cortas rectas y las curvas tan rápidas. Aún así, Dovizioso dio un pasito más con 11 puntos y una quinta posición. Para Le Mans, la mejora siguió su curso, cuarta posición y un test importante en Montmeló tan sólo unos días después, para conocer el nuevo trazado y los neumáticos de carcasa más dura.

Pero en Mugello llegó la mayor sorpresa de la temporada para Dovizioso. El fin de semana había sido más complicado que otras vez por el mal estado en el que se encontraba el piloto, quien no pudo pegar ojo la noche antes de la prueba. Aunque quien lo hubiera dicho. Se subió a su Ducati el domingo y ofreció una carrera para el recuerdo. El primer puesto ante su afición era más que merecido. Las cosas siguieron igual de bien en Barcelona, llegó y dominó sin problemas en un trazado con muchos cambios a lo largo del fin de semana. La mayor felicidad llegaba al salir líder del mundial del Gran Premio.

Assen y Alemania supusieron otro tremendo bajo en comparación con las citas pasadas. El italiano fue quinto y octavo respectivamente. Aun así Paolo Ciabatti, Director Deportivo del Ducati Team, analiza lo que llevamos de competición con "grandes resultados para Dovizioso". El piloto se encuentra en tercera posición de la clasificación general de puntos, a 6 puntos del líder.

Lo cierto es que para Andrea Dovizioso la Desmosedici 2017 es "la mejor Ducati que he rodado". La velocidad sigue siendo su mejor baza, aunque se ha mejorado en el giro y han perdido un poco en estabilidad. "La base es muy buena. No es lo suficientemente bueno para luchar por el campeonato. Pero es mucho mejor que en 2013", reveló el italiano.

Jorge Lorenzo sigue adaptándose

La presión ha estado presente en todo momento sobre sus hombros. Y parece que sigue ahí. Es cierto que todos veíamos al tres veces campeón del mundo ganando ya carreras desde el minuto uno con la Ducati. Pero su adaptación le está llevando un poco más de tiempo. Quiere entender bien la moto y parece que poco a poco lo va consiguiendo. La confianza está cada vez más presente.

El Gran Premio de Qatar llegaba con mucha expectación por verle vestido de rojo y blanco por primera vez en una cita oficial del campeonato. Todos queríamos presenciar un gran duelo, pero ha medida que las vueltas pasaban, nuestras esperanzas diminuían. Jorge acabó siendo décimo primero. Un debut nada soñado para el mallorquín.

Siguiendo con Argentina, otro desastre para Ducati. Si ya no era suficiente con el cero de Andrea Dovizioso, se sumaba otra caída al box. En el Gran Premio de las Américas, Jorge fue noveno, remontando poco a poco el mal arranque de temporada. El objetivo para Jorge ahora es intentar ser la mejor de las Ducati de manera regular.

Pero el momento clave llegó en Jerez. Un circuito que tan buenos resultados y momentos le da siempre a Lorenzo. Y este año no sería menos. Para sorpresa de todos, el nuevo piloto Ducati subió al podio en tercera posición después de una bonita lucha. No se esperaba tan rápido pero llegó, con fuerza y esfuerzo, pero se consiguió. 

En Le Mans parecía que los problemas de la marca italiana podían haber cesado y por fin veríamos a Jorge coger las riendas. Firmó una sexta posición positiva en comparación con las primeras citas y, sobre todo la pretemporada. En Mugello fue octavo y en Montmeló cuarto. Grandes resultados para seguir cogiendo fuerza y confianza.

Pero las cosas volvieron a dar un vuelco en Assen y Alemania. Cuando parece ir todo bien, vuelven a dar pasos hacia atrás. Lorenzo se clasificó 15º y 11º respectivamente. “No podemos estar contentos ni con la posición ni con la diferencia respecto al ganador. Sabíamos que estas dos carreras eran muy complicadas para nosotros, pero si en Assen no sacamos nada positivo, aquí hemos sacado alguna conclusión que nos servirá para circuitos más favorables para mí”, explicó tras la carrera en Sachsenring.

Actualmente, Jorge Lorenzo se encuentra en novena posición de la clasificación general. Mucho más lejos de lo que estamos acostumbrados. Pero el es un guerrero y seguro que le veremos luchar por su primera victoria con la Ducati o, al menos, seguir trabajando para remontar esta primera parte del campeonato.