Luchar por el playoff de ascenso a Segunda División exige tener los cinco sentidos dirigidos al mismo objetivo y prescindir de distracciones. Eso lo puede achacar la SD Ponferradina, que desde que iniciara diciembre se ha visto obligada a disputar la Copa de la Real Federación Española de Fútbol. De hecho, el Real Unión de Irún fue el equipo encargado de apear al conjunto berciano de las semifinales de la competición. De no haberlo hecho, el cuadro blanquiazul se vería obligado a disputar, al menos, dos encuentros más, con todo lo que eso implica.

Tras muchas semanas marcadas por la mala preparación y el exceso de viajes, la Deportiva dispondrá de seis días para preparar el próximo envite ante el Caudal Deportivo en el Estadio El Toralín. Pedro Munitis ha preparado cinco sesiones y una de estiramientos previo al duelo, que se ha iniciado en la mañana de este lunes con recuperación para los titulares de este pasado domingo. El martes, el equipo descansará, en el que será el único día en el que la plantilla no se ejercite antes de volver a la actividad el miércoles en el Anexo del feudo berciano.

El equipo descansa el martes y vuelve al trabajo el miércoles.

Un deseo del preparador de la Deportiva y que finalmente tendrá a su alcance para acometer el único objetivo de luchar por el playoff de ascenso a Segunda División. Un propósito que se ha puesto de cara gracias a los tropiezos del Pontevedra CF, que si bien, no están siendo aprovechados en su totalidad por el cuadro berciano. Los pupilos de Pedro Munitis tendrán que ejercer de anfitriones del cuadro granate, en un choque que puede ser fundamental en las aspiraciones de unos y otros. Aunque ahora ya no valen excusas.

La Deportiva afrontará estas últimas trece jornadas sin distracciones y con la necesidad de tropezar lo menos posible para hacerse hueco entre los cuatro primeros de la tabla. Siete de ellos en El Toralín, que será pieza fundamental en las aspiraciones del conjunto berciano, que no ha terminado de sentirse agusto en su feudo. Lo podrá hacer con toda su plantilla a disposición a excepción de un Adán Gurdiel que sigue su proceso de recuperación con el objetivo de volver lo antes posible a reintegrarse con el resto del equipo.

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