Volvía LaLiga 1|2|3 al Estadio Ciutat de València, dando lugar en la jornada 10 un enfrentamiento entre Levante UD y RCD Mallorca, donde el conjunto azulgrana buscaba una efeméride no vista desde la temporada 2002/2003: cinco victorias consecutivas.

El Mallorca, muy lejos de conseguir una estadística similar, no daba por perdido el partido, y comenzó ganando el choque antes de los primeros quince minutos. Poco después reaccionó el Levante igualando la contienda. Ya en el segundo acto,  se culminó la remontada gracias a una obra maestra de Lerma.

De nuevo a remontar

En cuanto echó a rodar el esférico, Pedro López, incisivo en ataque, manejó la primera oportunidad para los locales: su centro, despejado por la defensa acabó en un córner que Natxo Insa consiguió rematar de cabeza, pero se marchó por encima del larguero. A esta llegada se sucedieron varias internadas de Morales a banda cambiada (por la derecha), creando peligro pero sin materializar en gol. 

Pese al claro dominio azulgrana, el primero en adelantarse fue el RCD Mallorca. Y lo hizo en la primera oportunidad que tuvo: Ansotegi remató por bajo una asistencia de Moutinho, ante la que Raúl Fernández poco pudo hacer para evitar el primer tanto de la noche. El marcador reflejaba un 0-1 sorprendente por lo visto en el terreno de juego, y al Levante le tocaba de nuevo remar a contracorriente.

No le duró mucho la alegría a un Mallorca estaba siendo dominado por los azulgranas: Chema, en el minuto 17, cabeceó a las mallas un sensacional centro de Verza desde dentro del área pequeña. Era el 1-1, y la afición no se conformaba. Cuatro minutos después, Roger pudo culminar una temprana remontada, sin embargo, su disparo dentro del área pequeña se fue a la izquierda de Cabero.

Superado el énfasis de los posteriores minutos al gol local, el dominio de los granotas seguía latente, aunque las llegadas no era tan efusivas y la sensación de peligro disminuyó. Así finalizó la primera parte, con 1-1 en el electrónico y dominio azulgrana.

Remontada consumada

Arrancó el segundo periodo del partido muy falto de ritmo. Ambos entrenadores movieron ficha en los banquillos (en el Levante, Lerma sustituyó a Verza mientras que en el cuadro mallorquín, Pleguezuelo entró en lugar de Company), y con ello había que esperar a ver las reacciones de ambos conjuntos.

Superado ese tiempo, fue de nuevo Muñiz quien realizó un nuevo cambio, algo que ya ha hecho alguna vez: hacer un cambio que no modique el dibujo en el descanso, y poco tiempo después, con otro cambio, generar una modicifación del sistema buscando algo positivo para el equipo. En esta ocasión, el cambio del minuto 56 fue en favor del delantero Rafael Martins, que entraba en lugar del centrocampista Campaña, jugando por tanto con dos delanteros en el verde (Roger y Martins).

El revulsivo en ataque no tardó en llegar. En el minuto 59, el propio Rafael realizó un disparo muy fuerte y seco que Cabrero despejó como buenamente pudo. En la jugada posterior, Abraham dejó un balón templado a Lerma que, desde la frontal del área, encarado a la izquierda y sin dudarlo un segundo, evió un zambombazo que se coló, fuerte y con efecto, por la escuadra izquierda del portero del Mallorca. Sencillamente imparable. El líder imponía su ley en el Ciutat de València, remontando el choque. Era el minuto 60, quedando por tanto media hora por delante.

Tuvo que agotar los cambios el entrenador azulgrana: Chema, tocado, dejaba su lugar a Saveljich en el minuto 67. Mismo minuto en el que Fernando Vázquez se veía obligado a cambiar la situación y aprovechando el cambio del rival dio entrada a Lekic, sentando a Damià, un cambio claramente ofensivo. Los minutos pasaban y el Mallorca se veía no podía conformarse, haciendo un nuevo cambio y gastando la última bala: entraba Salomao, se iba Moutinho. Era el minuto 75, y quince minutos dan para marcar un gol. Sobre todo a un Levante acostumbrado a recibirlos en los últimos compases.

Apretaba el RCD Mallorca con más corazón que cabeza. Llegaba asiduamente, pero no generaba peligro suficiente para marcar un nuevo gol. El sabio público congregado en el Ciutat de València, consciente del dominio rival en estos minutos del partido, animó con ahínco a su equipo, que esperaba replegado para matar el partido a la contra. Fue así, a la contra y a favor del Levante, como llegaron las ocasiones más claras el resto del partido, en el que faltó poco para que llegara el tercer tanto local, a pesar del susto en el descuento donde Raúl Fernández detuvo un balón raso peligroso.

El marcador no se movió y con esta victoria, el Levante es más líder gracias a la derrota del Lugo, al tiempo que el Mallorca se codea con los puestos de descenso. En la jornada 11, el líder visitará al Mirandés, mientras que el Mallorca jugará en casa contra el Alcorcón, equipo encasillado en la parte baja de la clasificación.

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