La Sociedad Deportiva Eibar recibirá el próximo domingo a las 18:30 horas al Celta de Vigo, un equipo con un proyecto renovado de la mano de Juan Carlos Unzué. El exjugador de Barcelona y Sevilla dirige al equipo gallego tras la marcha de Eduardo 'Toto' Berizzo. Es momento de echar la vista a los puntos clave de este partido liguero.

Un rival tocado siempre es peligroso

El Eibar deberá tener cuidado con el Celta si quiere lograr un buen resultado, pues los celestes llegan a Ipurúa en un mal inicio de temporada. Con cuatro puntos y un bagaje de una victoria, un empate y tres derrotas, se sitúan en décimo séptimo puesto de la clasificación. Es un equipo muy peligroso arriba, pero hasta la fecha le están lastrando los fallos defensivos. El buque insignia sigue siendo su gran capacidad ofensiva; con la verticalidad de Iago Aspas y la buena forma de Maxi Gómez por bandera, el necesitado Celta supondrá una seria amenaza para el Eibar.

La defensa sin balón, un quebradero de cabeza

El Celta lo pasa mal defendiendo, ya ha quedado dicho. Unzué, por más probaturas que implanta jornada tras jornada, no ha logrado aún tener una zaga estable y segura. Es una dolencia heredada de la pasada campaña y se ha acentuado en esta: sufre mucho cuando tiene que ceder más protagonismo ofensivo al rival y así se vio contra el Getafe en la noche del jueves (1-1). Tras adelantarse en el marcador, los 'celtiñas' se echaron atrás y lo pagaron. Teniendo el balón el Eibar puede hacer daño.

Las ganas de vencer auguran diversión

El Eibar viene de caer por 6-1 en el Camp Nou, en un partido en el que los armeros desplegaron buen juego pero Messi resolvió con severidad. Las sensaciones que se llevaron los de Mendilibar de allí fueron buenas, pero ahora lo que buscarán será desquitarse ganando al Celta, también deseoso de vencer. De ello se puede esperar un partido bonito para el espectador, con presiones altas y ataques sin miramientos en ambas áreas.

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