Durante el Gran Premio de Singapur se hizo oficial el baile de motores. Toro Rosso montaría Honda en 2018 y McLaren, Renault. Esto repercutía indirectamente a Red Bull. El primer equipo de Helmut Marko actualmente monta motores Renault y el contrato se extiende hasta 2018, pero en 2019 tendrían que pasar a Honda.

Todo esto puede dar un pequeño vuelco, a pesar de que se dice, que al equipo le costó mucho decir que si a los japoneses. Marko lo desmiente: “Contactamos con Honda e hicimos nuestra propia investigación también. Por lo que aprendimos, tenemos una visión optimista del futuro. Vimos a ambos McLaren dentro de los diez primeros en Singapur, vimos un motor en desarrollo y sabemos lo que pasa entre bastidores”, una estadística que puede fallar, ya que Honda va bien en los circuitos lentos y los siguientes en esta temporada.

Continuaba diciendo: “Honda tiene el potencial económico, la infraestructura necesaria, una de las fábricas más modernas, con sus correspondientes plataformas de test y un compromiso completo con la F1 y con las victorias en su asociación, pero debemos tener en cuenta la mentalidad japonesa, por supuesto, un poco diferente a la europea”.

Durante la mañana del lunes 25 de septiembre se ha hecho oficial la colaboración de Aston Martín con Red Bull, pero Marko dice que no tiene nada que ver con las unidades de potencia: “Aston Martin es una cooperación económica que no tiene nada que ver con trenes de potencia. Ahora tenemos ganas de ver cómo van a trabajar Toro Rosso y Honda. 

Además, el jefe del equipo deja entrever que la incorporación de Honda a su coche sea antes de tiempo: “En septiembre de 2018, podré decir lo que vamos a hacer en 2019, será un buen momento para ver cómo trabajan Toro Rosso y Honda”.

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Sobre el autor
Jaime Chico Dueñas
Coordinador de F1 VAVEL. Me podéis encontrar en @JaimeCD4