El Mallorca lleva desde el comienzo de la presente temporada presentando ciertas dificultades en ataque que lo hacen uno de los conjuntos menos goleadores de la categoría. Cierto es que la eficacia defensiva ha logrado mitigar las enormes carencias en ataque. El cuadro menos goleador y que menos goles encaja ha vuelto a dejar muestras de sus virtudes y defectos en el encuentro ante el recién ascendido UCAM Murcia.

El punto logrado en Tenerife podía ser positivo consiguiendo una victoria ante su afición a pesar de la imagen mostrada, no obstante, no ganar en casa suponía desaprovechar una oportunidad de oro para escalar puestos en la clasificación. En frente tenía a un rival que está demostrando una buena adaptación a la categoría y que venía de golear al Almería con cuatro goles.

El escaso margen para recuperarse tras el choque en Tenerife precisaría de realizar rotaciones y es por ello, que Vázquez alineaba a Óscar Diaz, Pol Roigé, Salomao y Company además de a Damià como consecuencia de la lesión de Juan Rodríguez.

El partido daba el pistoletazo de salida con un cuadro bermellón deseoso de llevar la voz cantante. La posesión del balón parecía ser de los locales que tocaban en busca de las primeras ocasiones sin demasiado acierto. El UCAM Murcia, por su parte, lograba hacerse fuerte en su área esperando sus oportunidades a la contra.

Aún en la primera parte, llegaba la primera ocasión clara para los locales en botas de Salomao. El chut desde fuera del área era despejado por el meta mallorquín del UCAM Biel Ribas. Poco después los visitantes iban a tener sus opciones de ponerse por delante en el marcador.

El arranque de la segunda parte denotaba una mayor intención de los baleares por dominar la creación de peligro, sin embargo, tales intenciones se diluían conforme avanzaba el encuentro. El UCAM lograba hacerse con el partido en la segunda parte y lograba arrinconar a su rival. Ante tal situación, se precisaba un cambio que diera frescura al Mallorca y que le permitiera deshacerse de la presión del rival.

Precisamente en la segunda mitad llegaban las dos ocasiones más claras del partido y ambas para el cuadro murciano. La primera consistía en un pase en profundidad desde la banda izquierda que Imaz no lograba introducir en la meta tras verse superado Roberto Santamaría. En la segunda ocasión, protagonizada de igual modo por Imaz, Santamaría lograba repeler un disparo peligrosísimo en un mano a mano.

Pronto entrarían Brandon, Dalmau y Moutinho para darle frescura al equipo y poder afrontar la recta final con garantias.

La ocasión más clara para los locales llegaba tras un centro en banda derecha que Brandon trataba rematar en forma de chilena cuyo rebote recalaba en Juan Domínguez. La volea realizada por éste último permitía a Biel Ribas lucirse con una parada espectacular.

Tras el pitido final las sensaciones eran amargas para ambos equipos ya que ninguno logró aprovechar las ocasiones generadas y por ello ambos técnicos coincidían en que el empate era el resultado más justo.

Los mallorquines suman un total de siete puntos en liga mientras que los murcianos acumulan diez lo que les permite soñar con meterse en la lucha por los puestos de ascenso.

La próxima jornada el Mallorca viaja a Lugo para medirse ante uno de los equipos que mejor fútbol practica y que está siendo una revelación esta campaña. No será un encuentro fácil ya que el conjunto gallego tiene en sus filas al que fuera delantero mallorquinista Joselu quien está cuajando un inicio de temporada muy prometedor. El partido está programado para el sábado 1 de octubre a las 18:00.

El UCAM Murcia recibe al Mirandés de Carlos Terrazas en la Condomina en el que se vivirá un choque de equipos que han sorprendido en este inicio de temporada. El Mirandés está situado en la zona alta de la clasificación y viene de ganar al Tenerife, por lo que no le pondrá las cosas fáciles a los murcianos.

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