El pasado martes fue un día fatídico para La Liga y para los amantes del fútbol español. El FC Barcelona tampoco consiguió mantener la renta obtenida en el Parque de los Príncipes y quedaba fuera de la máxima competición europea a la vez que los atléticos. No obstante, doble debacle para los catalanes, que iban a ver como su equipo se quedaba sin ningún tipo de opción de disputar el nuevo Mundial de Clubes de la FIFA en 2025.

Mundial al que sí que acudirá el Club Atlético de Madrid. La FIFA otorgaba dos plazas por federación y los del 'Cholo' Simeone ocuparán la segunda de ellas. El Real Madrid, por su parte, tenía la clasificación asegurada tras ser campeón de Europa en el año 2022. Más allá de la clasificación a Semifinales por parte de culés y colchoneros, las directivas tenían en mente el formar parte de este nuevo torneo debido a motivos sociales y, sobre todo, económicos.

  • ¿Cómo es el nuevo Mundial de Clubes?

El organismo de la FIFA, en su afán por modernizar el fútbol y actual y generar altas cifras de ingresos y beneficios, decide crear un nuevo torneo entre clubes semejante al de selecciones.

Su historia comenzará en 2025 y tendrá como primera sede los Estados Unidos de América. Al igual que la Copa Mundial que todos conocemos, treinta y dos equipos lucharán por ser el campeón intercontinental. Este acontecimiento mundial reunirá a los mejores clubes de cada una de las confederaciones internacionales: AFC, CAF, Concacaf, CONMEBOL, OFC y UEFA.

El torneo dará comienzo el próximo día 15 de Junio de 2025, a la finalización de la temporada en Europa, y finalizará el día 13 de Julio con un equipo levantando el título de campeón mundial. Hasta llegar a esa fecha, cada continente debió haberse organizado para organizar qué conjuntos obtendrían la invitación por parte de la FIFA.

Europa, como viene ocurriendo en todos los torneos entre continentes, se adjudicó la mayor parte de los cupos. Dispone de doce, repartidos entre los cuatro últimos campeones de la Champions League y los ocho mejores posicionados en el ránking UEFA de las últimas cuatro temporadas (no pudiendo ser más de dos por país). Seis cupos son los que agota la Conmebol, la mayoría de ellos a sus respectivos campeones de la Copa Libertadores. Cuatro cupos se reparten para Asia, África y Norteamérica; y de los dos que restan, uno es para el líder del ránking de Oceanía y otro, para el invitado del país anfitrión. 

Cuando se conozca la totalidad de los equipos con invitación al torneo, quedarán encuadrados en cuatro bombos y serán sorteados en ocho grupos de cuatro conjuntos, donde nunca podrá haber más de dos de la misma confederación. A partir de ese momento y como se viene haciendo en gran parte de los torneos profesionales, los dos mejores de cada grupo avanzarán a la siguiente fase donde comenzarán las rondas del 'ko'. Sin partido por el tercer y cuarto puesto, en la gran final se dará a conocer el equipo consagrado como campeón del mundo. 

Bombos de los sorteos habituales de la FIFA | @FIFAcom_es
Bombos de los sorteos habituales de la FIFA | @FIFAcom_es

A mediados del mes de Abril de 2024 y con la reciente incorporación del Atlético de Madrid, ya conocemos muchos de los equipos que harán vibrar las gradas de los estadios del país norteamericano:

Confederación  Equipos clasificados
CAF Al-Ahly, Widad Casablanca (+2).
CONMEBOL Palmeiras, Flamengo y Fluminense (+3).
AFC Al-Hilal, Ulsan Hyundai y Urawa Red Diamonds (+1)
UEFA Chelsea, Real Madrid, Manchester City, Bayern de Múnich, Paris Saint-Germain, Inter de Milán, Borussia Dortmund, Porto, Atlético de Madrid, Benfica, Juventus y Salzburgo.
CONCACAF Rayados de Monterrey, Seattle Sanders y Club León (+1).
OFC Auckland City.
EEUU (Anfitrión) (+1)
  • La llegada del Atlético de Madrid

Para el nuevo Mundial de Clubes, España podía llegar a ocupar hasta dos plazas de las repartidas por el continente europeo y la UEFA. Una de las plazas la ocupó el Real Madrid tras levantar al cielo de París la Champions League de 2022. Desde ese momento, FC Barcelona y Atlético de Madrid se supieron rivales y, además de la competencia interna por futbolistas y de sus enfrentamientos en competiciones españolas, surgía una nueva lucha por la segunda plaza española. 

Ninguno de los dos conjuntos tenía una plaza asegurada sólo por pertenecer a la federación española de fútbol. Para hacerse con la plaza debían levantar las orejonas de 2023 o 2024 o, con un método más factible, escalar posiciones en el ránking europeo. 

Al comienzo de esta última temporada, el Barcelona partía en desventaja tras haber caído los años anteriores a la UEFA Europa League (donde los méritos no figuran para la clasificación) mientras que el Atlético igualaba todas sus actuaciones menos en 2022, que llegó hasta Cuartos de Final. Esa ligera ventaja de los madrileños les aseguraba su clasificación al próximo Mundial de Clubes, siempre y cuando el Barcelona cayese eliminado en la misma ronda o antes que ellos. La metodología de puntuación que consta es la de: 2 puntos por cada victoria lograda, 1 punto por cada empate, 4 puntos por clasificar a la fase de grupos, 5 puntos por clasificar a los octavos de final y 1 punto por cada ronda superada a partir de los cuartos de final.

El Atlético en su paso por la Champions 23/24 | Foto: @Atleti
El Atlético en su paso por la Champions 23/24 | Foto: @Atleti

Por tanto, el pasado Martes, mientras todo el continente estaba pendiente de los partidos en Barcelona y Dortmund, las entidades también llegaban a tener en cuenta objetivos a largo plazo. El Atlético de Madrid disponía de la cifra de sesenta y siete puntos, por sesenta y uno de los azulgranas; por lo que jugaban la eliminatoria con pie y medio en el Mundial. Recién eliminados y aún en el césped del Signal Iduna Park, desde Barcelona llegó una ínfima "ayuda" del Paris Saint-Germain en forma de rayo de luz entre las sombras de la derrota e iluminó a los rojiblancos con la clasificación al próximo Mundial de Clubes de 2025.

  • Impacto económico, deportivo y social

El Atlético de Madrid continúa con su proceso de modernización del club y de rejuvenecimiento de la plantilla. Después de este año alcanzando altas rondas de las competiciones que disputaba, aunque sin éxito, si consigue el objetivo mínimo de clasificarse entre los cuatro primeros de la competición regular, habrá adquirido una gran cifra de billetes en sus arcas.

Sin nada oficial estipulado, el Atlético conseguirá la cuantía de cincuenta millones de euros a los ingresos de esta temporada únicamente por clasificar al Mundial de Clubes. Además, se sumará la cantidad de en torno a setenta y cinco 'kilos' por su participación en La Liga de Campeones. Todo ello, sin sumar los derechos de televisión, publicidad, entradas, marketing y lo correspondido a la competición española. Por lo tanto, la inversión del club en la plantilla debería ser gigante si quiere llegar a la cima de Europa. Pero precisamente esto es lo que la afición demanda. Hace muchos años que la directiva se conforma con avanzar de la fase de grupos de la Champions League y establecerse entre los cuatro primeros de liga. La nula inversión por la mentira de querer cerrar el episodio en positivo es el aspecto que genera polémica en las entrañas del Metropolitano. Este mercado veraniego la afición espera que, aunque muchos deberían buscar nuevos proyectos, no haga falta tener que dejar salir para que alguien pueda entrar.

En lo deportivo, el tema crítico de siempre. ¿Hasta dónde van a dar de sí a los jugadores? Las asociaciones que representan a los futbolistas demandan, en este caso, la falta de descanso o, viéndolo de otra forma, la alta carga de partidos durante toda una temporada. Al fin y al cabo, el fútbol es un producto valioso y cuanto más y a mejor nivel se juegue, más beneficios obtendrán los altos cargos. Debido a ello, muchas organizaciones generaron controversia por este torneo desarrollando la idea de que la FIFA antepone el dinero a la salud de los jugadores. Las primeras reacciones hace años de las grandes ligas, incluida la española, fueron de rechazo pero con el tiempo valoraron la propuesta y aceptaron las invitaciones. En clave atlética, como curiosidad, este campeonato podría hacer al Atlético campeón mundial sin haber sido campeón continental. Peculiaridad que no se produciría por primera vez, ya que en 1974 el Atlético alzó la Copa Intercontinental que disputó, después de que el Bayern de Munich (que ganaron a los atléticos la Copa de Europa) renunciase a su participación.

El Atlético, campeón de la Intercontinental de 1975 | Foto: @Atleti
El Atlético, campeón de la Intercontinental de 1975 | Foto: @Atleti

Recordemos que el producto es un regalo para el país que albergue las citas, pero ¿qué puede aportar socialmente Estados Unidos para albergar esta primera edición de la competición? Para empezar, Estados Unidos es la gran potencia de América y una de las grandes potencias mundiales. Sin embargo, su fútbol (allí denominado 'soccer') nunca ha llegado a ser un referente mundial en cuanto a jugadores, y mucho menos en cuanto a clubes. Quizá la promoción de este torneo por parte de la FIFA y el traslado a ese país sirvan para incrementar el interés social y conocimiento en la sociedad. En el tema de recintos deportivos, puede que los estadios no sean los que una persona futbolera de nacimiento desee visitar al menos una vez en la vida, pero la modernidad no falta. A enormes estructuras que pueden dar cabida a prácticamente cien mil personas, infinitud de espectáculos de luces y sonido y cientos de puestos de comida, bebida y actividades, se le suma ahora el fútbol mundial de primer nivel. Normalmente, las giras veraniegas por EEUU de los grandes equipos europeos ofrecen partidos amistosos de preparación sin sacrificio ninguno y con un sinfín de cambios y canteranos poco conocidos. Esta vez, el gran torneo de clubes dotará a Estados Unidos de la oportunidad de hacerlo grande y de, a la vez, disfrutar de las grandes figuras futbolísticas que vemos día tras días por televisión. Además, servirá como anticipo del Mundial de selecciones del próximo 2026.

El Atlético se despedía triste de la Champions | Foto: @Atleti
El Atlético se despedía triste de la Champions | Foto: @Atleti

Para finalizar, puede llegar a parecer mentira que después de una eliminación de la máxima competición europea haya noticias esperanzadoras y positivas, pero así ha sido. El fútbol es el deporte más irracional que existe. Cuando crees que has visto todo, llegan cosas nuevas que te hacen seguir llevándote las manos a la cabeza. Y eso es lo bonito de este deporte. Después de una eliminación, por mucho que duela y por mucha esperanza que hubiese depositada, lo seguimos amando.