Jan Oblak alcanzó en el partido del pasado lunes contra el Granada la nada desdeñable cifra de 200 partidos con la portería a cero con el Club Atlético de Madrid y entró, si no lo estaba ya por diversos y justificados motivos, en la historia del club colchonero. Además, no pudo hacerlo de mejor forma. El Atleti consiguió la victoria por 0-1,  sirviendo esto de homenaje a su trayectoria en el club de la capital de España, que ve en el 0-1 su resultado más repetido desde que llegó Diego Pablo Simeone.

El bueno de Jan solo ha necesitado 421 partidos para alcanzar esta cifra. Datos que reflejan que el portero sigue en el top mundial de guardametas. Por ponerlo en contexto, en el siglo XXI solo Manuel Neuer necesitó menos partidos para cerrar su portería hasta en doscientas ocasiones, haciéndolo además en un Bayern de Múnich que, por su forma de jugar, facilita la labor de echarle el candado al arco.

Esta espectacular cifra refleja también como ha cambiado el Atlético de Madrid en los últimos años. Un equipo que antes de la llegada del Cholo Simeone se desangraba en defensa y que con el entrenador argentino, Courtois y Oblak mediante, ha conseguido hacer de la defensa una fortaleza y aunque ahora esta faceta vuelve a renquear sigue arrojando cifras que permiten al club del Metropolitano competir en todas las competiciones y escenarios. Algo impensable hace una década.

Las metas futuras de Jan Oblak pasan por ampliar esta cifra y llevarla a números aún más de récord. Tiempo tendrá, ya que el meta esloveno tiene contrato hasta 2028 y parece que, a sus 31 años, sigue teniendo cuerda para rato. La venta de Grbic y el fichaje de Moldovan parece significar solamente un intercambio de nombres en la figura de portero suplente por lo que se antoja complicado dejar de ver a Oblak bajo palos buscando seguir sumando porterías a cero por el bien de su récord y de su Atleti.