Ríos de tinta se escribieron en verano, con el mercado de fichajes aún abierto, sobre el futuro de Rodrigo Riquelme. Tras una temporada notable en Girona, al canterano atlético no le faltaban novias para la próxima temporada. Que si seguir en el club catalán, que si cambiar de aires y marcharse a Sevilla a jugar en el Real Betis e incluso Guardiola llegó a aparecer en el horizonte de "Roro" para llevárselo al Manchester City. Sin embargo, el chico lo tenía claro: si Simeone le prometía ser uno más del primer equipo, tenía decidido que su sitio era el Atleti.

Y así fue, el Cholo apretó a Miguel Ángel Gil Marín, tal y como el propio entrenador argentino reconoció en una entrevista en la radio durante esta semana, para que tanto Samu Lino como el propio Riquelme se quedaran en la disciplina rojiblanca. Y el acierto no pudo ser mayor.

En lo que al futbolista español se refiere, está alternando titularidades y suplencias pero, siempre, disputando una importante cantidad de minutos. Además, el chico no ha desaprovechado el tiempo y ha dejado un sinfín de regates y dos goles, todo ello partiendo desde el puesto de carrilero izquierdo, donde Simeone cree que puede potenciar sus virtudes.

Y el premio a su buen hacer no ha tardado en llegar. Riquelme estará en los próximos compromisos de la Selección Española absoluta. Algo que el propio jugador ha catalogado como "un sueño". Y no es para menos.

Su paso por el fútbol inglés, donde no tuvo mucho éxito, y sus cesiones a Mirandés y Girona, respectivamente, han curtido a un jugador "de la casa" que se ha echado a bolsillo al aficionado rojiblanco. Descaro, velocidad y gol le avalan. Queda por ver como evoluciona Riquelme en este primer año en la plantilla rojiblanca aunque se puede augurar que será el primero de muchos.