Surne Bilbao Basket 80 - 97 Zunder Palencia: Fiesta Palentina

En un año con pocas alegrías, el Zunder Palencia consiguió llevarse la victoria ante un Bilbao Basket muy flojo y que suma su cuarta derrota consecutiva en la competición liguera.

Con el sonido del pitido inicial, los dos equipos buscaban marcar la diferencia con jugadas rápidas, que por un lado un afinado Hands conseguía comenzar con un 2 de 2 en triples, dejando en el marcador un resultado inicial de 0-6. Sin embargo, una técnica innecesaria del propio Hands rompía el vacío anotador de los locales, haciendo que poco a poco consiguieran materializar más tiros (8-8).

Y es que, con los primeros cambios de Ponsarnau y de Luis Guil, un Zunder Palencia muy apoyado por los cientos de aficionados trasladados a Bilbao, seguían mostrando un ritmo superior a los vascos, que concedían muchos tiros de tres muy liberados (13-18).

De esta forma acababa un cuarto marcado por los numerosos triples del Palencia (5 de 7) y por unos desastrosos primeros 10 minutos que dejaban a la afición local muy defraudada con el desempeño de sus jugadores, donde lo único positivo ha sido el acierto desde el tiro libre (17-24).

De tres en tres

En el segundo cuarto, la tónica del partido se mantenía, unos visitantes poseídos por los continuos ánimos de su afición, no paraba de encestar desde la línea de 6,75cm, mientras que los locales se alejaban del partido con continuas pérdidas no forzadas (25-35). Esto provocaba el primer tiempo muerto del partido de un Jaume Ponsarnau muy preocupado por la poca claridad defensiva y los pésimos porcentajes en tiros de tres (0 de 5 en 15 minutos).

Tras la reanudación, un Bilbao Basket un tanto inspirado, gracias a Thijs de Ridder, conseguía meterse en el partido con tres buenas acciones consecutivas, que forzaron el tiempo muerto de los visitantes (33-37).

Aunque poco duraría la alegría de los hombres de negro, ya que en apenas 2 minutos otros 2 triples consecutivos hacían que llegarán a los últimos dos minutos del cuarto con la mayor diferencia del partido, obligando al banquillo local a pedir un nuevo respiro para sus jugadores (33-45).

De esta forma se ponía fin a una primera mitad, que pilló, una vez más, desprevenido a un Surne Bilbao Basket que ha sido superado en todas las facetas de juego (sobre todo en los tiros de 3 puntos), incluyendo en unas ganas que le sobraban a un equipo descendido pero que mostraba en los primeros 20 minutos tener más ambición que muchos equipos de la ACB (37-51).

Menos ritmo y menos ganas todavía

El tercer cuarto comenzaba con un ritmo más calmado de ambos equipos, llevando las posesiones al límite de su tiempo. Este nuevo ritmo de juego, por momentos parecía favorecer a un Surne Bilbao Basket que poco a poco y con un gran Kullamae conseguía disminuir una abultada renta (48-60). Aunque la falta de ganas y el buen juego del Palencia hacía que las posibilidades de ganar el partido fuesen desapareciendo por momentos (53-66).

De esta manera finalizaba un tercer cuarto en el que el ritmo bajó y en el que el Bilbao Basket seguía con muchos problemas en todos los ámbitos del juego, siendo superado hasta en la afición (58-73).

Más honor y mejor juego

Durante los últimos diez minutos del partido, los locales buscaban una remontada que se veía constantemente frustrada por un gran juego de un Palencia, que tenía cada vez más a mano su victoria número seis del año.

Con el paso de los minutos, los constantes cambios en las filas de los hombres de negro conseguían mover un poco el partido (64-77). Aunque al Palencia le entraba todo y lo que no acaba en falta, haciendo imposible el intento de remontada de los locales (70-85).

Así se ponía fin a una jornada para el recuerdo de los palentinos, que han demostrado tener nivel suficiente para estar mucho más arriba de lo que están. Por su parte, los vascos deben replantearse muchas cosas tras el juego mostrado este sábado en casa (80-97 ).