Una emoción que se esfuma en momentos. El sueño de New York Knicks fue arruinado por Tyrese Maxey que pudo anotar siete puntos en los últimos 30 segundos de partido. La magia sigue intacta en la eliminatoria y da alas a Philadelphia en la serie.

Tyrese lidera la remontada de Phili

Cuando un equipo lucha contra todo con unas convicciones tan fuertes, se produce un hecho que pone en relevancia la fuerza y entereza en los momentos más difíciles. Así se resume el partido de Philadelphia ante New York Knicks en el Madison Square Garden.

Ante un equipo revolucionado que sumaba altas como la de Duncan Robinson, se sumaban hazañas dentro de la cancha. Los 49 puntos, 5 rebotes y 9 asistencias de Maxey es para hacerlo un monumento en la ciudad de Philadelphia. Sumó junto a Joel Embiid en la remontada final.

Joel Embiid no estuvo exento de polémicas y tuvo un fuerte altercado con la defensa de los Knicks y el propio Donte DiVincenzo al igual que con Jalen Brunson al que golpeó fuertemente en el rostro en el último cuarto. Una ventaja que no duró mucho porque la irregularidad los hizo ceder ventaja en el marcador.

Los 19 puntos, 16 rebotes y 10 asistencias en el partido le dan un triple doble salvador para todo su equipo que sigue confiando en la posible remontada. Una situación crítica que levantan y ponen la eliminatoria 3-2. Dependen de sí mismos para seguir vivos en estos playoffs.

Los Knicks se resbalan ante Phili

A pesar de los 40 puntos, 3 rebotes y 6 asistencias de Jalen Brunson, el equipo no pudo mejorar su actuación de los otros partidos para enterrar a Philadelphia 76ers que se crece para el próximo partido. Llegan nuevos jugadores que pueden dar la victoria final, hasta entonces deben concentrarse mucho más.

Las segundas oportunidades fueron ganas por Phili y la falta de defensa también fue un factor que choca con el gran papel ofensivo en el Madison. Una derrota que no supone nada si es que pueden hundir las aspiraciones de sus rivales en el próximo partido y cerrar la eliminatoria por la vía fácil.