Philadelphia 76ers tenía una segund prueba de fuego ante New York Knicks en el Madison Square Garden donde no tenían margen de error ante la primera derrota. Demostraron ser un duro rival que finalmente se vio colapsado por un final inesperado.

Joel Embiid lidera al equipo

El pivot con nacionalidad americana sigue demostrando por qué es el mejor de toda la franquicia de la conferencia este. Hizo un gran esfuerzo para estar disponible junto a su equipo y pelear para poner empate la eliminatoria.

Junto a Tyrese Maxey consiguieron tumbar la defensa rocosa de los Knicks que no encontraban una solución a los golpes continuos de Joel Embiid. El pivot estaba acertado desde todas las posiciones y esto fue algo clave que dio espacios al resto de sus compañeros.

Una diferencia de hasta 11 puntos que no pudieron mantener durante la segunda parte del encuentro. Antes del descanso apareció el propio Jalen Brunson que no tuvo su mejor día. En cambio, Josh Hart anotando más de 4 triples mantuvo con alas las aspiraciones del segundo clasificado de la temporada regular.

La entrada de Kyle Lowry o Nicolas Batum o Tobias Harris no fue suficiente. El banquillo de los Knicks había conseguido mayor anotación, además de más protagonismo dentro del terreno de juego. Cada balón era una batalla que enfrentaba a ambos equipos.

La magia del Madison Square Garden

Todo llega en los 30 segundos finales donde iban perdiendo de hasta 5 puntos el equipo local. El éxtasis de la afición contagiaba a un Tyrese Maxey que no había cometido graves errores a perder un balón decisivo nada más sacar la pelota desde su área.

Una pérdida que ocasionaba un nuevo rebote ofensivo y el triple de Donte DiVincenzo los daba la ventaja en los últimos segundos del partido. Una posesión con fallo en el tiro de campo de Tyrese que aseguraba la segunda victoria para los Knicks que ven conseguida una gran ventaja en la eliminatoria.

La cara de Joel Embiid lo decía todo. Un poema que muestra a uno de los mejores jugadores ausente y bastante cansado por la batalla física del partido. Ni los 34 puntos, 10 rebotes y 6 asistencias de Joel Embiid y los 35 puntos, 9 rebotes y 10 asistencias de Tyrese Maxey fueron suficientes...

Hasta 5 jugadores de la plantilla que jugaron en el equipo local pudieron superar los dobles digitos. Un sueño que cada vez se hace más grande en el equipo. La eliminatoria encara una nuevo nivel de intensidad porque Philadelphia, no puede fallar ante su público en esta nueva derrota en los playoffs.