El futuro de Fank Ntilikina es uno de los grandes interrogantes de cara a la temporada venidera. Las recientes incorporaciones de Jarrett Jack, por un año, y Ramon Sessions a los Knicks abre el debate de, ¿Por qué gastaron los Knicks su ronda del draft en un base?. Este movimiento nos deja entrever que el joven base francés es un proyecto a futuro, como en su día lo fué Porzinguis, y no una apuesta de presente. La incorporación de Jarrett Jack, veterano de la liga, puede tener como finalidad la de tutor de los jóvenes bases Ntilikina y Baker, talentos emergentes a los cuales le queda mucho camino por recorrer.

A pesar de promediar 20 minutos por partido en 45 partidos con el Estrasburgo, y realizar una gran actuación en las finales del campeonato liguero, promediando 5,4 puntos y 1,5 asistencias por partido, ceder el mando del juego ofensivo de los Knicks a Ntilikina puede ser un riesgo. El jugador francés no esta acostumbrado al baloncesto americano, ya que ha jugado durante toda su carrera en Europa, por lo que el rookie necesita acostumbrarse y familiarizarse con el juego y la dinámica americana.

Por otra parte, el rol de base esta cubierto por dos reconocidos veteranos de la liga, Jarrett Jack y Ramon Sessions, los cuales tienen una aceptable y reconocible trayectoria en la NBA a sus espaldas. Ambos son jugadores acostumbrados a cambiar de aires con frecuencia, teniendo dificultades para asentarse en alguna disciplina. En Nueva York ambos pueden aportar cosas en la rotación del equipo, sin embargo, nos sigue dejando la duda de qué lugar corresponde a Ntilikina en el equipo newyorquino.

No mucha gente ha podido ver el potencial ofensivo y las cualidades del número 8 del draft. En Francia no dispuso de suficientes minutos como para asombrar con sus habilidades baloncestísticas, además, una lesión en su último partido con el Estrasburgo le privó de disputar la Summer League con los New York Knicks, perdiendo una gran oportunidad de sorprender a compañeros y aficionados.

VAVEL Logo