No ha sido el verano perfecto en Memphis ni mucho menos. Tras dar guerra en los Playoffs y llevar a los Spurs hasta los seis partidos, en el mercado han perdido a dos de sus mejores jugadores en el último lustro: Zach Randolph, que se marchó a los Kings y Tony Allen, que aún se encuentra sin equipo pero no tiene muchas intenciones de volver a Tennessee. El contrato de Parsons sigue siendo una losa muy pesada para incorporar alguna estrella y se han tenido que conformar con jugadores secundarios.

Es por ello que los líderes indiscutidos este año serán Marc Gasol y Mike Conley. Ambos han jugado desde el inicio de su carrera NBA en el equipo y serán los encargados de liderar al nuevo núcleo de jóvenes que tiene Memphis, formado por Wade Baldwin, Deyonta Davis, Ivan Rabb o Dillon Brooks. El periodista Matt Moore de CBS Sports ha revelado que una fuente interna de la franquicia les consideró “intocables” a los dos jugadores más importantes del equipo y rechazaron incluir sus nombres en cualquier conversación por un traspaso.

En cualquier caso, la salida de Conley parece complicada desde lo económico. En la agencia libre de 2016 firmó el astronómico contrato de 153 millones a lo largo de cinco años, el ultimo con opción de jugador en 2020 y con 33 años. Pese a su elevado salario, el base es un jugador regular, capaz de aportar en todas las facetas del juego, pero lejos de justificar ese sueldo en la pista.

El caso del pívot español es distinto. Marc firmó en 2015 una renovación que lo une al equipo hasta el 2020, pero también con opción de jugador. El mediano de los Gasol cumplirá en enero 33 años y conforme van pasando los años, el tiempo para conseguir un anillo de campeonato se va acortando. El propio jugador no descartó una salida de Memphis si el equipo no tomaba la dirección correcta y su futuro puede que sea más difícil de definir.

Boston anda buscando al pívot y se sabe que ofreció rondas altas y buenos jugadores antes del traspaso de Irving. Sin embargo, los Grizzlies confían en Gasol y Conley para que sean el futuro de la franquicia. Ellos dos, junto a Chandler Parsons (un gran interrogante) serán cruciales para que el equipo pueda, por lo menos, volver a plantarse en la postemporada.